Si parece extraño ver un refrigerador en el polo norte, más extraño aún fue ver que los ligados al fútbol venezolano apostaran en un principio, a una buena actuación de la joven plantilla del Aragua FC en el ya finalizado campeonato criollo. Sin embargo, los “Chamos” de Manolo Contreras hicieron lo posible para despejar el camino y hacer una temporada aceptable, silenciando a los que denigraron el talento de esta escuadra Aurirroja.
En lo que fue la primera fecha del campeonato ante Llaneros de Guanare, las luces de alerta fueron encendidas luego de caer de manera estrepitosa 2-0. A pesar de ello, los aragüeños retornaron a casa para meterle 4-1 a Estudiantes de Mérida, y así arrancar un apertura satisfactorio, con 7 victorias, 3 empates y 7 derrotas para alojarlos en la novena posición de la tabla.
A pesar de la buena maniobra a principio de campeonato, el cuadro “Chocolatero” le tocó superar en el clausura una mala racha de hasta 5 derrotas en fila que les causó desánimo y una profunda impotencia por no concretar una victoria.
Naturalmente, las largas conversaciones que sostenía Manolo Contreras con sus muchachos a diario (antes de cada entrenamiento), les devolvió la confianza necesaria para salir del atolladero con madurez.
Fue contra viento y marea pues, que los “Chamos de la Ciudad Jardín” no se dejaron amedrentar en lo que fue la recta final del campeonato, en la que muchos lo tenían en sus lista como uno de los candidatos al descenso, pero el valor de la joven plantilla Aurirroja hizo que permanecieran donde pertenecen, en la división de oro del fútbol profesional venezolano.
El record de los maracayeros en el clausura fue de 2 victorias, 8 empates y 7 derrotas para un total de 14 puntos, en la penúltima posición de la tabla. Nada fácil para los de Contreras, quienes tuvieron que lidiar con los acostumbrados contratiempos.
Siendo así, el Aragua FC acumuló un total de 38 puntos con, 9 victorias, 11 empates y 14 derrotas que le otorgaron en definitiva la casilla 13 en la tabla general, por encima del Vigía, Maracaibo, Carabobo y los descendidos Portuguesa y Estrella Roja.
En lo que fue el último compromiso del campeonato para los Aurirrojos en el Monumental de Maturín ante Monagas SC, el profesor Manolo Contreras hizo llover aragüeños en el inmenso estadio de la ciudad de Maturín, pues terminó el partido con 10 maracayeros en cancha, algo atípico en los clubes venezolanos.
Si bien es cierto que el Aragua FC no puede competir en cuanto al costo de la nómina con otros equipos, éstos si lo hacen en el terreno de juego, y vaya de qué forma. Se podría recordar, por ejemplo, que ni equipos grandes pudieron pasar por encima de los “Chamos Chocolateros”.
El marcador global contra Deportivo Táchira fue de 2-1. Mientras que con Caracas fue de 4-2. Es decir, la diferencia por partido fue por la mínima.
En definitiva, el corazón de cada aragüeño y los no aragüeños que vivieron y sintieron la camiseta durante el campeonato 2008-2009, fue la esencia para encarar de la mejor manera cada uno de sus compromisos, con victorias, derrotas, empates y hasta pérdidas que parecían triunfos.
Los mentores de la pandilla Aurirroja, Manolo Contreras (Director Técnico), Miguel Acosta (Asistente Técnico) y Jacobo Pérez (Preparador Físico), tuvieron la tamaña responsabilidad de lidiar con los sueños de cada uno de estos chamos.
Jóvenes promesas como Jesús Lugo, Jackson López, Sebastián Camargo, David De Sousa, Henry Rodrígues y los Vinotintos Francisco Fajardo y Carlos Salazar. También otros aragüeños de la talla de Freddy Segovia, Carlos Sánchez, Orlando Montanari, Jackson Mijares, Ángel Agnello, Jean Carlos Neto, Jean Carlos Issa, Eddy Vargas, Luigi Palomino, Jorge Márquez, Eduardo Valdez y Rommel Saab.
A los no aragüeños, como los argentinos Pablo Pérez y Agustín Vistarop, el colombiano Jhon Jairo Angulo, el tachirense Armín Márquez, el guayanés Héctor Valdés, el cumanés Gabriel Rodríguez y el varguense Heatklif Castillo (campeón goleador de la liga), quienes también sintieron y sudaron la inconfundible camiseta mostaza.
Son ellos los protagonistas de lo que fue una toda una “Épica Aurirroja” dentro de la temporada 2008-2009, llena de altos y bajos, tristezas y alegrías, regaños y celebraciones, mentiras y verdades que, finalmente, dejan un cúmulo de experiencia importante para abordar una nueva misión en el próximo campeonato del fútbol profesional venezolano, y con buenas nuevas por venir.
La noche del 16 de abril del 2008 el Aragua FC se consagró como el campeón del país al hacerse acreedor de la Copa Venezuela, otorgándole un cupo directo a la Copa Sudamericana en 2009.
Para el mes de septiembre del presente anno, estos mismos chamos de Aragua, les tocó enfrentar a las Chivas de Guadalajara, un equipo con más de cien años, al que hicieron sufrir hasta el último momento (con tres juveniles en cancha) dejando un marcador global de 3-2.
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